Día Mundial del SIDA 2021: recordando a aquellos que hemos perdido, honrando a los sobrevivientes y trabajando para cerrar la brecha de equidad en salud del VIH con Donna Thompson

diciembre 21, 2021

Donna Thompson, CEO

1ero de diciembre de 2021

 

Hace dos semanas, un paciente del ACCESS Rogers Park Family Health Center le dijo al personal que quería hablar con el director ejecutivo porque lo que tenía que decir no podía expresarse simplemente en un correo electrónico o una carta.

Cuando hablamos, comenzó la conversación haciéndome saber que el centro de salud le había salvado la vida. Describió haber sido diagnosticado con VIH en la década de 1990. Comenzó a venir a ACCESS Rogers Park en 1998. Esto fue durante los primeros días del centro de salud, ya que abrimos la sede en 1997 como un faro en el lado norte para la atención de enfermedades infecciosas. De hecho, fue allí donde contratamos a nuestro primer consultor de salud del comportamiento y un proveedor dedicado de enfermedades infecciosas enfocado en pacientes con VIH/SIDA integrados dentro de nuestro modelo de atención primaria.

Hasta el día de hoy, este paciente llama a ACCESS Rogers Park su hogar médico y expresó sinceramente su gratitud hacia todo el equipo de atención. Nombró fácilmente a todo el personal, desde la recepcionista y el especialista en beneficios hasta su equipo de atención clínica, el consultor de salud conductual y nuestro capellán. Durante nuestra conversación, reflexionó sobre el largo viaje que ha realizado y su asombro por estar vivo cuando tantos de sus amigos fallecieron como resultado de la epidemia de SIDA.

Mientras continuaba hablando sobre su proceso, yo también reflexioné sobre ser una enfermera joven en los primeros días de la epidemia del SIDA. El miedo, el aislamiento y la desconfianza que experimentamos como sociedad en ese entonces no es muy diferente de lo que estamos experimentando hoy con la pandemia de COVID-19. La epidemia del SIDA dejó a la comunidad LGBTQIA estigmatizada durante muchos años debido a hechos erróneos que eclipsaron y consumieron al público, lo que resultó en vergonzosos estereotipos y discriminación.

Dado que las comunidades de color ahora tienen la tasa más alta de VIH/SIDA y han sido las más afectadas por el COVID-19, es imperativo que alcemos nuestras voces para crear conciencia, educar a nuestras comunidades y poner fin a ambos.

A medida que creamos conciencia este Día Mundial del SIDA, sigamos uniéndonos de los brazos para garantizar que nuestras comunidades estén informadas sobre los hechos y tengan un acceso equitativo a la prevención y el tratamiento del VIH/SIDA. Detengamos el estigma hoy.